Esta ruta, que fue propuesta en la última asamblea por nuestro compañero Carlos Oliver, tiene una longitud algo inferior a los diez kilómetros, y se realiza en unas tres horas a paso tranquilo, incluyendo paradas para realizar fotos y tomar un bocado.
Si bien cuenta con el pequeño inconveniente de encontrarse algo alejada (aproximadamente tres horas en coche), se trata no obstante de una ruta muy interesante, realmente bonita (las vistas desde la Raya son espectaculares), fácil y divertida de realizar. Tanto por su longitud, como por el desnivel a superar (menos de 300 metros), esta ruta estaría clasificada como de nivel bajo, según nuestros criterios.
Sin duda será una de las propuestas a tomar en consideración en el futuro, muy probablemente en el próximo otoño, toda vez que el programa del primer semestre del año 2016 está ya cerrado.
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